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miércoles, 25 de diciembre de 2024
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DOM AENOR

Dictaminan a favor de reformar Código Penal y Código Procesal Penal para penalizar la conducción peligrosa

La Comisión de Seguridad Nacional y Justicia aprobó dos dictámenes cruciales para reformar el Código Penal y el Código Procesal Penal, con el objetivo de actualizar las normativas y reforzar las sanciones contra las conductas irresponsables al momento de conducir vehículos, protegiendo así a los ciudadanos salvadoreños.

Las reformas tienen como principal objetivo penalizar con mayor rigor el delito de conducción peligrosa, un problema que ha generado riesgos para la seguridad vial y afectado a muchas personas en el país. Con estas modificaciones, se establecen penas más altas para quienes infrijan la ley, garantizando una mayor seguridad jurídica para las víctimas y sus familias.

Entre las conductas consideradas como conducción peligrosa están:

  • Disputar la vía entre vehículos.
  • Realizar competencias de velocidad en la vía pública sin permiso de las autoridades.
  • Conducir bajo los efectos del alcohol o drogas.

La reforma incluye una actualización importante en el artículo 147-E del Código Penal, que establece las penas para quienes cometan este delito. A partir de la modificación, las sanciones para los infractores serán las siguientes:

  • Conducir vehículos livianos de forma peligrosa llevará una pena de dos a cinco años de cárcel, frente a los uno a tres años que establece la normativa actual.
  • Si la violación de la ley la comete alguien que conduce transporte colectivo o de carga, la pena aumentará de cinco a 10 años.
  • En casos de homicidio culposo o lesiones muy graves causadas por conducción peligrosa con un vehículo liviano, las penas de cárcel se elevarán hasta 10 años.
  • Si la infracción involucra unidades de transporte de pasajeros o carga, la pena podrá aumentar hasta 15 años.

La reforma también otorga un mayor valor probatorio al examen de alcoholemia realizado por las autoridades en los puntos de control vehicular. Este examen será considerado prueba suficiente para determinar en flagrancia que se ha cometido un delito, lo que agiliza el proceso judicial.

Además, se establece que, si una persona es encontrada culpable de conducción peligrosa, su licencia de conducir será suspendida. Esta decisión podrá ser tomada de manera administrativa por el Viceministerio de Transporte, independientemente de que haya una sentencia judicial.

Estas reformas buscan reducir los accidentes de tráfico, mejorar la seguridad en las vías y enviar un mensaje claro de tolerancia cero frente a la conducción irresponsable.