El investigador del área de Macroeconomía de la Fundación Nacional para el Desarrollo (FUNDE), Rommel Rodríguez, dio su valoración entorno al debate sobre la aprobación del Presupuesto General de la Nación para este 2017.
Curul85 (C85): El gobierno no ha hecho suficientes ajustes para superar el déficit del presupuesto. ¿De qué depende el ajuste para presentarlo equilibrado?
Rommel Rodríguez (RR): Es un tema complicado, porque recordemos que este presupuesto del año 2017 se da en un marco, digamos previo, fue un marco de acuerdo que se alcanzó en noviembre del 2016, que corresponde a la aprobación de una ley de responsabilidad fiscal.
Tiene que ser un presupuesto austero, no muy grande, o que si registra un crecimiento, debe de ser moderado. La solución factible que nosotros hemos considerado es que se debería de aprobar el presupuesto tal como estaba presentado, pero como parte de un pacto de diálogo, de un marco general de discusión y en las primeras sesiones plenarias de este año es que se iban a dar las modificaciones a ese presupuesto aprobado.
(C85): Préstamos e impuestos. El gobierno habla de que es la única forma de financiar los faltantes en presupuesto. ¿Por qué no se habla de ahorro?
(RR): Yo considero que el gobierno no está visualizando adecuadamente los espacios que pueden haber para optimizar recursos. Y cuando nosotros hablamos de eso, no nos referimos a quitar funcionarios, sino que puede haber otros ámbitos mediante la reasignación de recursos que pueden contribuir a un mejor gasto. Por ejemplo, en el caso de los seguros médicos privados que tienen muchas carteras del Estado, son montos elevados que podrían ser un refuerzo para el Instituto Salvadoreño del Seguro Social, y este instituto podría ser más eficiente y brindar un mejor servicio no solo para los empleados públicos, sino que para todos los ciudadanos.
No se ha invertido lo suficientemente en la administración de la fiscalización de los impuestos, es decir, que haya personas debidamente capacitadas de hacer los procesos adecuados de fiscalización y control para que los sujetos pasivos puedan pagar adecuadamente sus impuestos.
(C85): Si de aprobarse el Presupuesto General de la Nación así como está, ¿en cuánto tiempo se estarían viendo problemas financieros del país?
(RR): Recordemos que para que el presupuesto pueda tener una fluidez en su proceso de operatividad, es necesario ver los flujos de cómo se van recaudando los recursos, especialmente los tributos. Nosotros hemos tenido una tributación el año pasado de alrededor de $200 millones con respecto al presupuesto votado. Cuando se presenta el presupuesto, se presenta la estimación de lo que las autoridades de Hacienda consideran que se va a recaudar. Esa recaudación es lo que nutre los gastos.
Si no se aprueba podría darse a mediados de julio. Y de lograrse el acuerdo, podría darse a finales de este año.
(C85): ¿Cuáles son los ajustes a nivel macro que se necesitan hacer para evitar estos problemas financieros y presupuestos a futuro?
(RR): Esa es una pregunta de largo alcance. Nosotros hemos considerado que existen marcos o ámbitos de acción. Aquí hay una salida muy fácil y es que la economía creciera mucho, que registráramos una tasa de crecimiento económico arriba del 3%, y este crecimiento podría dar una mejor recaudación tributaria, e incluso eso contribuiría a una menor emisión de Letras del Tesoro y estabilizar la deuda en el largo plazo.
Pero es necesario crear acuerdos políticos entre el gobierno y el sector empresarial, especialmente con los empresarios de mayor peso. Nosotros lo que hemos hecho como Fundación Nacional del Desarrollo son medidas de carácter fiscal, y son medidas que incluyen el establecimiento de un impuesto predial, un impuesto de emergencia que debe de operar solamente durante un ejercicio fiscal para poner el saldo de LETES a cero, ya que ahorita está en mil millones.
De igual forma el congelamiento de plazas. No significa quitarlas, sino que congelar para que el Estado no crezca en mayor número de plazas al menos momentáneamente. Sabemos que esto sería un impacto en la economía, pero será un impacto pasajero durante un ejercicio fiscal.