El 7 de octubre, funcionarios del Gobierno de El Salvador y de Estados Unidos firmaron un acuerdo que permitirá la asistencia mutua entre las administraciones aduaneras de ambos países. Este compromiso fue ratificado por los diputados de la Comisión de Salvadoreños en el Exterior, Legislación y Gobierno, quienes emitieron un dictamen favorable para la ratificación del convenio.
El acuerdo busca facilitar el comercio bilateral, prevenir y combatir delitos transnacionales en las fronteras, y capacitar a los funcionarios aduaneros de ambos países. Entre sus objetivos principales está la detección de ilícitos como el tráfico de drogas, armas o la entrada de terroristas a los países firmantes.
Como parte del acuerdo, personal de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) estará presente en el aeropuerto de El Salvador, donde se encargará de la inspección previa a los vuelos con destino a Estados Unidos.
Los diputados recibieron a representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Dirección General de Aduanas para conocer los beneficios que traerá esta alianza, que también busca el intercambio de buenas prácticas en la gestión aduanera.
Julio Abarca, jefe de asesoría legal de la Cancillería, destacó que El Salvador está comprometido en la lucha contra la corrupción. Aseguró que este acuerdo refuerza los esfuerzos nacionales para combatir los delitos en las fronteras, enviando un mensaje claro a la comunidad internacional sobre el compromiso del país en este ámbito.
Por su parte, José Luis Maradiaga, subdirector de Aduanas, amplió detalles sobre el tratado, señalando que otro de los propósitos del acuerdo es ofrecer programas de despacho simplificado en las oficinas de registro para las 14 empresas salvadoreñas que han sido acreditadas como Operadores Confiables.
“Este acuerdo es crucial para la asistencia mutua entre las administraciones aduaneras de ambos países, dada la importancia de la relación comercial entre El Salvador y Estados Unidos”, concluyó Maradiaga.
