Fitch asegura que un evento de impagos futuro es improbable gracias al exitoso intercambio y pago de amortizaciones de bonos a principios de 2023.
A principios de año, El Salvador logró hacer el pago de bonos globales, considerado como una decisión acertada por Fitch Ratings, quien reconoce que este hecho mejoró las expectativas que ellos habían planteado inicialmente. Gracias a esto, han calificado a El Salvador como “CCC+”, lo que refleja una mejora sobre la calificación previa.
El Gobierno, además, ha visto reconocidos sus esfuerzos para reducir el déficit fiscal, llevándolo hasta un 2.5% del PIB en 2022. Esta disminución ha sido constante, siendo de 10.1% en 2020 y de 5.5% en 2021. Estos números han sido gracias a una fuerte recaudación de impuestos, así como una sólida reducción de gastos.
Esta calificación es gracias a la recompra de bonos externos soberanos con vencimiento en 2025 (reduciendo la deuda pendiente de $800 millones a $348 millones) y alcanzar 75.9% en la deuda del sector público no financiero (frente al 88.1% de 2020 y el 80.4% de 2021).
Fitch ha anticipado que la deuda pública/PIB seguirá la tendencia a la baja en años venideros gracias a la mejora del saldo primario y que la consolidación fiscal seguirá su buen curso dadas las medidas adoptadas por El Salvador