La madrugada de ayer, los diputados de la nueva Asamblea Legislativa aprobaron, en sesión plenaria extraordinaria, el régimen de excepción solicitado por el presidente de la República. La medida, aprobada con 67 votos, tiene por objetivpo salvaguardar la vida de los salvadoreños ante el repunte de homicidios en el país.
A la sesión convocada por el presidente legislativo, Ernesto Castro, no asistieron la mayoría de diputados del partido ARENA. Algo que fue cuestionado por los demás parlamentarios. “A la sesión plenaria extraordinaria faltaron los mismos diputados que se dedican a defender a corruptos en las comisiones. Los diputados del FMLN asistieron, pero se abstuvieron de votar”, criticó el diputado Raúl Castillo, de la bancada cyan, en entrevista televisiva.
Por su parte, Arturo Batarse, en su participación en una entrevista radial, consideró que “fue lamentable la ausencia de los diputados de oposición». Empero, añadió que no les «sorprende, si durante el tiempo en el que gobernaron sus partidos no hicieron nada para proteger la vida de los salvadoreños”.
El artículo 29 de la Constitución de la República faculta al gobierno a establecer régimen de excepción en casos de guerra, invasión del territorio, rebelión, sedición, catástrofe, epidemia u otra calamidad general, o de graves perturbaciones al orden público.
Con la medida avala se suspenden temporalmente las garantías constitucionales a la libertad de reunión e inviolabilidad de la correspondencia. Asimismo pueden suspenderse el derecho al detenido a ser informado sobre sus derechos y las razones de su captura. Por otra parte, la detención administrativa ya no será de tres días, sino que se podrá prolongar a 15.
Las autoridades reiteraron que las excepciones a este régimen son las reuniones o asociaciones con fines religiosos, culturales, económicos o deportivos.