* Por Diego Jiménez
Era evidente que en el contexto preelectoral que vive el país, más de algún político se iba a subir a la coyuntura de la muerte de «Gustavito», el hipopótamo del zoológico nacional, que hasta mediados de la semana se vendía como «una víctima más de la violencia que azota al país».
Y es que el mismo tiempo determina que cualquier coyuntura nacional sea aprovechada por la clase política, para «vender espejitos» al ciudadano, en este caso «Gustavito».
Hablo de la iniciativa presentada por maltrato animal, hablo del pleito del alcalde capitalino con Secultura, etc.
Parece que todos aprovechan la coyuntura preelectoral para estar en el reflector ciudadano, pues según la nueva tendencia del marketing político, reputación buena o mala, te sitúa en el ojo ciudadano.
Tal parece que cada tema que surja, de ahora en adelante, habrá un aprovechamiento de la clase política para subirse a estos temas.
Ahora, es labor de cada ciudadano conocer qué temas son relevantes para la nación y cuáles solo generan «humo».
Sin duda alguna debemos prestar atención a temas coyunturales como las pensiones, la situación fiscal del país y la inseguridad, no del tema del hipopótamo
Aclaro que lamento la muerte de «Gustavito», pero considero muy irrelevante darle la magnitud que se ha gestado en la red social a causa de su muerte. Evidentemente los responsables del deceso del hipopótamo deben responder por sus actos.
Pero igual que eso, nos deben de importar los asesinatos diarios que ocurren en el país. El cuestionamiento a la clase política por sus acciones debe de continuar, porque debemos elegir con criterio en las próximas elecciones, porque es necesario separar lo bueno de lo malo.